Subiendo al castillo nos encontramos con uno de los barrios con más encanto de Dénia (junto con el todopoderoso barrio de los pescadores), el barrio de Les Roques. Sus estrechas calles serpentean hacia el cielo en busca de las murallas del castillo, vigilante siempre (qué poético me ha quedado)
No encontrarás aquí gran cantidad de tiendas ni bares, sólo la tranquilidad de un buen paseo y la seguridad de que estarás trabajando los glúteos. Para todo esto ya tenemos la calle Loreto y alrededores muy cerca de él. También encontramos por la zona el Ayuntamiento, el trinquet, el famoso túnel, la ronda de las murallas…
Da gusto perderse por aquí, entre las bonitas casas que lo pueblan. Eso sí, muy extenso no es, por ello hay que completar la jornada visitando el castillo.